Nunca máis

El naufragio del buque Prestige vuelve a la actualidad cuando se cumplen éste domingo tres años de la más inepta gestión de una emergencia medioambiental vista en la España democrática.

Esta foto fue tomada por satélite cuatro días después de conocerse la vía de agua que afectaba del barco y dos días antes de su naufragio: el reguero de fuelóleo marca la errática cadena de decisiones contrapuestas adoptadas por las autoridades españolas aquellos días, encabezadas por un ministro de Fomento y por un presidente autonómico que no consideraron oportuno abandonar su partida de caza para hacer frente a la marea negra que se le venía encima a miles de gallegos y a tantos ciudadanos españoles y franceses del Golfo de Vizcaya.

Miles de voluntarios trabajaron durante semanas en la limpieza del litoral y junto a la satisfacción de haber colaborado en paliar los efectos de la marea contaminante les quedará para siempre la memoria del chapapote que recogieron con sus manos.

Galicia todavía padece las consecuencias de aquel desastre medioambiental, cuya cronología puede consultarse en la web de la plataforma Nunca Máis, que encabezó la movilización ciudadana contra la nefasta gestión del Gobierno del PP.

La plataforma ha propuesto un decálogo para evitar que se repitan hechos similares y ha convocado una manifestación en Santiago éste domingo bajo el lema del "Día da dignidade" porque consideran que no están adoptadas todas las medidas necesarias para paliar las consecuencias de la marea negra ni para prevenir que otro naugrafio cómo éste vuelva a suceder.